Morir para salvar muchas vidas
Jesús ya pagó por todos sus pecados. Lo que resta es apropiarnos de la gracia de Dios para que nuestros pecados queden totalmente borrados (Miqueas 7: 18, 19), experimente la transformación que anhela y tenga la certeza de la vida eterna. Fernando Alexis Jiménez | Editor del Blog SalvosporlaGracia.com Joseph Blankson no lo pensó dos…